sábado, 29 de enero de 2011

Mis amores... y mis odios. Episodio 2.

Muchas especies animales se desarrollan en un ambiente gregario, forman asociaciones, grupos, manadas, colonias, enjambres. La cohesión de estas sociedades depende de la estructura del grupo. Grupos pequeños requieren estructuras simples. Grupos grandes, estructuras complejas. Las necesidades de un grupo más nutrido se convierten en un impulso evolutivo y generan la necesidad de una estructura organizacional cada vez más compleja y esto a su vez, en el caso de algunas especies, cerebros más grandes y con mayor capacidad de análisis.


Los inicios de las sociedades humanas siempre han llevado un factor de tamaño. Los humanos tendemos de manera natural a formar grupos y el tamaño de éstos se ve constreñido por su entorno. A la fecha existen grupos aislados de comunidades que apenas rebasan un par de cientos de integrantes y que han permanecido geográfica y genéticamente aislados del resto del mundo (el libro "Guns, Germs and Steel", de Jared Diamond explica esto mil veces mejor de lo que yo pudiera [soñara...] hacerlo. Les recomiendo leerlo). El tamaño de estos grupos, y las características de su habitat, son a su vez un factor que determina las necesidades del grupo y el desarrollo de sus reglas de convivencia y los conceptos del mundo (su Cosmología) en el que viven.


Somos curiosos por naturaleza, y nos incomoda no saber qué está pasando y por qué. Llevamos incrustado un cierto temor a lo desconocido, una especie de fobia por todo aquello que no nos sea familiar, cotidiano, y tendemos a darle NOMBRE a las cosas. Es una manera natural de relacionarnos con nuestro entorno, dada nuestra también natural curiosidad. Pero "bautizar" a los elementos de nuestro entorno no es suficiente. Nuestra curiosidad nos obliga a buscar respuestas, explicaciones, motivos, razones. Y cuando los conocimientos de una comunidad no son suficientes para conseguir esas respuestas, INVENTAMOS RESPUESTAS.


Conforme crece el número de integrantes de una comunidad crece la posibilidad de desarrollo tecnológico y por ende la capacidad de respuesta a nuestras preguntas. Si a eso le añadimos el descubrimiento de modos de vida que permiten más tiempo de ocio (la agricultura, por ejemplo), y el establecimiento de estas comunidades en lugares fijos, en contacto con otras comunidades, veremos que la posibilidad de crecimiento intelectual se dispara. Entonces vienen más preguntas y se necesitan más respuestas. Y si las dudas rebasan a la ciencia de ese momento, INVENTAMOS MÁS RESPUESTAS. Y nace la necesidad de agrupar todas las respuestas posibles en un sólo lugar: la RELIGIÓN.


La religión se convierte entonces en la depositaria del conocimiento de la comunidad. Monopoliza ese conocimiento y adquiere poder. Se convierte en la intermediaria entre el "creador" de los fenómenos naturales y crece y se hace más y más compleja y complicada. Le conviene ser así. Mientras menos entiendan los súbditos, más poder para ella. Y digo "súbditos" porque a final de cuentas la religión es de alguna manera el primer intento de gobierno organizado de los grupos humanos. Un gobierno centralista y autoritario.


La religión pasa de ser el medio para conocer a ser el medio para controlar. Demasiadas dudas, demasiadas preguntas y muy pocas respuestas. ¿Qué sucede? Simple, lo tenemos a la vista todo el tiempo. Cuando un infante entra a la edad del "¿por qué...?" y los papás no saben la respuesta a sus preguntas, lo más común (no todos somos así) es que le apliquen el Métodus Religiosus: porque sí... porque así son las cosas... porque yo lo digo.


La Religión nos dice lo que debemos creer y la Ciencia, por el contrario, nos muestra lo que podemos creer. Para la Religión lo importante es CREER sin PENSAR, para la Ciencia lo importante es PENSAR para poder CREER. La Religión no es capaz de aceptar sus errores y no acepta cambios, la Ciencia se nutre de sus errores, los acepta y cambia de ser necesario.


La Religión usa la más cobarde de las armas para mantener sumisos a sus adeptos: el miedo.


La Ciencia no usa armas, ni obliga a nadie a ser su adepto.


En fin, así es como lo veo. ¿Le sigo?

2 comentarios:

  1. La religión paso de ser un método para explicarle a el hombre ignorante su entorno (lo cual fue después hecho por la ciencia), a un método para darle una guía a su corazón. Y después, gracias a la misma avaricia humana de controlar a los demás y decidir lo que debe de haber en la mente y el corazón de las personas.
    Cuando eso no fue suficiente, decidieron controlar a la fuerza a quienes opinaban diferente, y para esto se apoyan en el miedo, el chantaje, la coherción, la traición, mmmhhh que otro método se me olvida??? La tortura, la violación, la mentira, el asesinato, ¡¡¡wow!!! Están siguiendo la Biblia "by the book"!!! Solo que le quitan lo de "No", así que, Juran, matan, roban, fornican, etc, etc.

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  2. La religión en efecto se ha ido desarrollando (evolucionando, podríamos decir) y sus fines han ido cambiando. Pero a partir de un punto se estancó. No concuerdo con todo lo que dices, pero se me hace muy interesante tu punto de vista. Es buen material para otro blog.

    Te mando muchos abrazos, hijo.

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